Por: Augusto López
Los deudores al ISSEMYM salen hasta por debajo de las alcantarillas, por lo que se ve en la nueva cartera de adeudos con corte al 31 de julio de este año.
El monto total aproximado de la deuda que golpea al Instituto es de $3,040,000,000.00 (tres mil cuarenta millones de pesos 00/100).
En el monstruo de deuda están instituciones públicas, ayuntamientos, organismos auxiliares y organismos municipales, pero lo que más llama la atención es que la UAEM ha puesto, otra vez, record y se lleva el primer lugar en el top ten de los que no han pagado al ISSEMYM. El nuevo monto es de $1,671,131,218.75 (mil seiscientos setenta y un millones, ciento treinta y un mil, doscientos dieciocho pesos, con 75 centavos) lo que representa el 55% de la deuda total contenida en la cartera de adeudos.
Por su parte el Instituto de Seguridad Social dice que la UAEM se encuentra «en proceso de regularizar su situación», y que el 42% de adeudos cuentan con un convenio de pago que «se viene cumpliendo oportunamente».
Parece que este “maratón” de retener cuotas a los trabajadores y no enterarlas al Instituto, en tiempo y forma, seguirá practicándose; aunque la complacencia de los propios afectados parece que ya se está agotando, ahora se están multiplicando las exigencias de auditorías que detecten y sancionen los manejos indebidos de recursos financieros con categoría de “sagrados”.
En este contexto, varias frases de la “deidad” universitaria en turno resultan como escupitajos en la cara de los afectados:
“Todos tenemos que hacer un esfuerzo, la Universidad lo hará, ya hemos estado en negociaciones con el director general del ISSEMyM para ver si encontramos algún acuerdo que nos permita dar viabilidad al pago de nuestra deuda con ellos”. Más adelante señaló que “intentarían” cubrir los porcentajes de las cuotas establecidos en la Ley de Seguridad Social.
“Todos necesitamos apoyar a esta institución de salud pública de los mexiquenses y en el tema de las cuotas hacer un esfuerzo los trabajadores dentro de las aportaciones, que las Instituciones hagamos también nuestro esfuerzo para intentar cubrir los nuevos porcentajes que le dan viabilidad financiera, que equilibran, que fortalecen las finanzas de esta institución que está cada vez más demandada con una población cada vez mayor que somos los adultos, que tenemos enfermedades más singulares como las crónico degenerativas que tienen un mayor impacto financiero por cuestiones de hospitalización o medicamentos especializados”
Los miles de trabajadores afectados por las retenciones y demás recursos que durante casi dos años no han llegado al ISSEMYM deberían decirle a Baca y compañía, que la acción principal para fortalecer las finanzas del Instituto es, la de pagar puntualmente las cuotas y aportaciones, no hay razón para qué, siendo recursos programados, etiquetados y reportados como gastados, se hayan desviado en el camino, y no sepa decir en qué cuentas están, ni en qué se gastó ese dinero.
Ahora las autoridades intentan minimizar el delicado asunto señalando que menos de la mitad de deudures cuentan con convenios de regularización del adeudo, pero lo que evitan decir es que no hay razón para que exista deuda en dónde se reportó mes con mes que se estaba pagando al Instituto de Seguridad Social del Estado de México y Municipios.
¿En dónde están más de 3 mil millones de pesos que no han llegado al ISSEMYM?
¿Cómo es posible que el director del ISSEMYM diga que quiere un instituto sano cuando al parecer ha sido pieza clave para que los deudores y la deuda continúen aumentando?
¿El Órgano Superior de Fiscalización del Estado de México actuará de manera pronta para auditar como se debe a la UAEM y al ISSEMYM (para empezar) o la lentitud y observaciones “de cuates” serán su camino a seguir?
Así como es importante que diputados y derechohabientes abroguen la nueva Ley ISSEMYM, es también fundamental que se auditen los manejos turbios que puedan ser pieza clave en el debilitamiento de los servicios de salud que el Instituto ofrece.