El exgobernador del Estado de México y consentido de la Universidad Autónoma del Estado de México, a salido a la defensa de los 31 científicos del CONACYT, que están siendo investigados por la Fiscalía General de la República.
Mediante un video de cuatro minutos y medio comentó:
«El que la hace la paga dice el refrán popular, y es correcto traída esta expresión al mundo del derecho penal, es que no haya impunidad, es decir que si se comprueba la responsabilidad de alguien en la comisión de un delito vaya ante un juez de cuenta de aquello que se le imputa y al final si está demostrado que merezca una sanción, pero tal parece, que ahora, lo que está vigente es otro refrán, el que nada debe… debe temer y es el caso de los 31 científicos que ahora están en capilla acusados de delincuencia organizada del lavado de dinero y de un sinnúmero de ilícitos previstos en el código penal, lo cual para decir lo menos, me parece un despropósito.
Ha habido más una campaña mediática de denostación, de descalificación, que elementos robustos, que le permitan a un juez penal librar y ejecutar una orden de aprensión. Han sido rechazadas al menos por aquello que se conoce un par de solicitudes de la fiscalía para llevar ante un juez porque no están demostrados, aunque sea elementalmente, los extremos de esta imputación, de esto que coloquialmente, no técnicamente, llamamos una acusación. Por eso estoy seguro que los científicos, que por cierto, son generadores de conocimiento, personas que se la pasan investigando en un laboratorio, lo mismo en un laboratorio de las ciencias duras, que en los cubículos en donde se llevan a cabo estudios en ciencias sociales, en humanidades, en historia y que lo que quieren es apoyos aunque sea mínimos del gobierno de la república y eventualmente de los gobiernos locales, se ha dicho que gozan de emolumentos de ingresos extraordinarios, de sueldos dorados, nada más falso. Creo que más bien hacen de su profesión una vocación, que incluso en condiciones económicamente difíciles, porque es su gusto y es su aportación a la sociedad mexicana y a la sociedad del mundo la generación de conocimientos socialmente útiles, que suelen ser el precedente o la materia prima para la toma de decisiones. Por eso me parece verdaderamente un agravio a la comunidad científica que se le está imputando a 31 de sus diríamos representantes, de gente respetada, que tiene toda una vida dedicada a esta labor, que suele no sólo ser de investigación sino también de docencia y de divulgación de conocimiento, que tienen periódicamente que acreditar con aportaciones actuales, contemporáneas, que siguen mereciendo un apoyo del gobierno, un apoyo presupuestal que no es otra cosa que recursos de la comunidad, puestos en manos de las autoridades competentes. Por eso pido, sumándome a las voces de la comunidad científica intelectual, a los profesores, pero también a los alumnos y en general de la sociedad mexicana.
Pido que no haya justicia por consigna, que no pretendan condenar antes de demostrar los extremos de una imputación y que dejemos, no solo en libertad, en libertad sin ningún adjetivo, así en libertad absoluta a los creadores, a los que lo que aprenden, lo ponen al servicio de la comunidad. No solo los necesitamos, son indispensables para que haya mayor calidad en la toma de las decisiones, me refiero a las acciones de gobierno, y que también los centros de conocimiento, fundamentalmente de educación superior, las universidades, los institutos tecnológicos, los centros especializados, puedan beneficiarse con este conocimiento generado a partir no solo del ejercicio libre de la profesión, de la aportación responsable y patriótica de quienes están comprometidos con México.
Estamos con ellos no queremos impunidad, pero no se vale la injusticia y menos la persecución.«
TE PUEDE INTERESAR