Al considerar que en los últimos años la cuenca de Valle de Bravo ha observado un fuerte deterioro ambiental debido al crecimiento urbano desmedido, los asentamientos irregulares, los cambios de uso de suelo, la deforestación y el desvío de ríos para alimentar lagos artificiales, el Congreso mexiquense solicitó información sobre el número lagos artificiales y presas de almacenamiento que actualmente existen en dicho municipio.
En sesión deliberante presidida por la diputada Ingrid Schemelensky Castro (PAN), la Asamblea avaló por unanimidad la solicitud de la diputada Edith Marisol Mercado Torres (Morena) para exhortar a la Comisión Nacional del Agua, a la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales, a la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente, a la Procuraduría Ambiental del Estado de México y a la Dirección de Desarrollo Urbano y Obras Públicas de Valle de Bravo a proporcionar esta información.
De acuerdo con el documento, el pasado 3 de septiembre a consecuencia de las fuertes lluvias se desbordó, en la comunidad de los Álamos, una presa construida en un predio privado por el aumento del Río El Molino, lo que provocó afectaciones en la zona, lo que hace necesario saber cuántos lagos y presas artificiales y privadas hay en el municipio y si éstos tienen los permisos correspondientes para que se tomen las medidas pertinentes conforme a derecho y así detener el ecocidio que ahí se observa en la Presa Miguel Alemán.