El Embajador de Palestina en México, Mohamed Sadaat da la bienvenida y agradece a los presentes, especialmente a los representantes de la Organización para la Cooperación Islámica, por su apoyo continuo. Se convoca una conferencia de prensa para conmemorar el 76 aniversario de la Nakba de 1948, un evento trágico donde grupos sionistas mataron y desplazaron a un gran número de palestinos. Se afirma que la Nakba sigue ocurriendo, con Israel cometiendo actos de violencia y destrucción a gran escala contra el pueblo palestino en los últimos meses, incluyendo la muerte de miles de palestinos y la destrucción masiva de infraestructura.
El discurso denuncia estos actos como genocidio y limpieza étnica, violando el derecho internacional humanitario y los valores humanos fundamentales. Se hace un llamado a los testigos y al mundo para asumir la responsabilidad de detener estos crímenes. Se menciona la solidaridad internacional hacia Palestina y el rechazo a la narrativa sionista, destacando la reciente votación en la Asamblea General de la ONU que favoreció la admisión de Palestina como miembro pleno.
Sadaat insta a la comunidad internacional a reconocer la Nakba, enfrentar a Israel, hacerlo responsable de sus políticas y crímenes, apoyar a los refugiados palestinos y tomar medidas prácticas para asegurar el respeto al derecho internacional. Finalmente, expresa gratitud a México y a los países, movimientos sociales y periodistas que apoyan a Palestina, concluyendo con una declaración de resistencia y esperanza para el futuro de Palestina.
Nota: Este resumen se ha elaborado basándose en la información proporcionada y no refleja ninguna opinión personal o posición del asistente. Además, es importante tener en cuenta que la situación descrita es compleja y está sujeta a diferentes interpretaciones y perspectivas. Se recomienda buscar fuentes adicionales para obtener una comprensión más completa del contexto y las implicaciones de los eventos mencionados.
Hoy, ustedes están siendo testigos de todos estos crímenes y, a través de ustedes, el mundo entero. Por esto ustedes están llamados a desempeñar un papel de enorme responsabilidad para detener este genocidio.
La solidaridad internacional expresada hacia nuestro pueblo por parte de muchos países y movimientos sociales, y especialmente de estudiantes, refleja el aumento en la consciencia de la comunidad internacional sobre las mentiras de la narrativa sionista hacia el conflicto, y también, sobre el grave peligro que los crímenes israelíes representan para la estabilidad internacional. El mundo está cansado de que Israel siga actuando como si estuviera por encima de la ley.
En este contexto, lo ocurrido el pasado 10 de mayo en la Asamblea General de las Naciones Unidas, donde una enorme mayoría de los países del mundo votaron a favor de que se admita el Estado de Palestina como miembro pleno de la ONU, es una muestra de la solidaridad hacia nuestro pueblo y de que la comunidad internacional comprende que la única solución al conflicto en la región es el respeto a nuestro derecho inalienable a la autodeterminación, a través del establecimiento del estado palestino independiente, libre y soberano, en las fronteras de 1967 y con Jerusalén Oriental como su capital. El genocidio de los últimos 7 meses confirma la intención israelí de eliminar a nuestro pueblo y que la Nakba sigue. Ante esta actitud por parte de Israel, llamamos a la comunidad internacional a:
- Reconocer a la Nakba como un hecho histórico con consecuencias legales y políticas; entre ellas, la comisión del crimen de limpieza étnica contra el pueblo palestino.
- Enfrentar la actitud desafiante de Israel, poner fin a su impunidad y hacer lo necesario para asegurar el respeto al derecho internacional.
- Hacer a Israel, la potencia ocupante, responsable por sus políticas coloniales y por todos sus crímenes ejercidos contra nuestro pueblo desde 1947.
- Apoyar y financiar a UNWRA, y hacer respetar el derecho de los refugiados palestinos al retorno (alrededor de 5.9 millones de refugiados que se encuentran en 58 campos en Jordania, Líbano, Siria y en el propio territorio palestino), pues es esencial para alcanzar una paz justa y duradera.
- Recordar que los Estados miembros de la comunidad internacional están obligados a no reconocer una situación que deriva de un acto internacional indebido; a no prestar ayuda o asistencia que facilite o contribuya a sostener esta situación; y a cooperar unos con otros para poner fin a tal situación.
- Tomar pasos prácticos para hacer que Israel, la potencia ocupante, responda por sus actos a través de los mecanismos internacionales disponibles; por ejemplo, garantizando que la Corte Internacional de Justicia y la Corte Penal Internacional puedan desarrollar sus investigaciones y tomar sus decisiones libres de presiones y amenazas.
- Implementar las medidas provisionales ordenadas por la Corte Internacional de Justicia en lo que se refiere a la comisión del crimen de Genocidio por parte de Israel y a la complicidad en este crimen.
Quiero finalizar expresando nuestra profunda gratitud a México y a todos los países que han expresado su apoyo a nuestro pueblo, a los movimientos sociales solidarios en México y en todo el mundo, y a los periodistas comprometidos con la verdad que muestran al mundo la realidad del sufrimiento de nuestro pueblo.
Palestina permanecerá, la ocupación sucumbirá.