Debido a que en México seis de cada diez niñas, niños y adolescentes de uno a 14 años han experimentado algún método violento de disciplina en sus hogares y a que uno de cada 15 ha recibido alguna forma de castigo físico severo, la diputada Karina Labastida Sotelo propuso a la LX Legislatura incorporar en la normatividad estatal la prohibición expresa del castigo corporal en contra de los menores de edad.
Con la representación del grupo parlamentario de Morena, la presidenta de la Directiva para el actual periodo ordinario planteó que de conformidad con la legislación mexicana e instrumentos internacionales como la Convención sobre los Derechos del Niño, las y los menores tienen derecho a la protección contra los castigos corporales y otras formas de castigo crueles o degradantes.
La propuesta de reforma a la Ley de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes, la Ley de Educación y el Código Civil, todos del Estado de México, incorpora la prohibición expresa del maltrato corporal y del castigo humillante cometido en agravio de niñas, niños y adolescentes; propone sanciones para asegurar el debido resguardo a su interés superior, así como eliminar disposiciones que propician la ejecución, prevalencia y justificación de la violencia extrema.
También busca reformar disposiciones de la legislación civil que permiten el derecho de corrección, homologar criterios y armonizar el Código Civil para incorporar la prohibición expresa del castigo corporal y el castigo humillante dentro de las obligaciones de quienes ejerzan patria potestad, tutela o guarda y custodia, así como de las demás personas que, por razón de sus funciones o actividades, tengan bajo su cuidado a niñas, niños o adolescentes.
Karina Labastida agregó que de acuerdo con la Encuesta Nacional de Niñas, Niños y Mujeres en México (ENIM, 2015), en el país 63% de infantes de uno a 14 años fueron sometidos al menos a una forma de castigo psicológico o físico por miembros del hogar, 63% de entre uno y 14 años recibe en los hogares disciplina violenta, en 53% de los hogares se ejerce agresión psicológica y en 44% psicológica y física.
Por lo anterior, afirmó, “no existe espacio para ningún grado de violencia legalizada contra las niñas y niños, por lo que, los castigos corporales o físicos y otras formas de escarmientos humillantes, crueles o degradantes son formas de violencia y perjuicio ante las cuales los Estados deben emplear todas las medidas legislativas para eliminarlas”.
El documento será dictaminado por las comisiones de Atención a Grupos Vulnerables y Especial para las Declaratorias de Alerta de Violencia de Género contra las Mujeres por Feminicidio y Desaparición.