La diputada Juliana Felipa Arias Calderón propuso exhortar a la Secretaría de la Mujer del gobierno estatal y al Consejo Estatal para el Desarrollo Integral de los Pueblos Indígenas del Estado de México (Cedipiem) a destinar recursos a las Casas de la Mujer Indígena “Zana Jñatjo” (Luna Mazahua) y “Dakü D’ay’o” (Vida Nueva), ubicadas en Ejido La Virgen de San Felipe del Progreso y en Santa María Canchesdá, Temascalcingo.
Ante la Asamblea plenaria, la presidenta de la Comisión de Asuntos Indígenas de la LX Legislatura explicó que en 2003 el Gobierno Federal implementó el programa “Casas de la Salud” en Oaxaca, Puebla, Guerrero y Chiapas, para la atención a la salud sexual y reproductiva de este sector. Posteriormente, 2007 se diseñó un modelo autogestivo de atención a la violencia contra las mujeres, con perspectiva de género, y enfoque intercultural, al que se le nombró “Casas de la Mujer Indígena” (CAMIs), que inició en 2008 con 13 casas en distintos estados del país.
En la entidad se construyeron dos casas, la primera en 2010, en Ejido la Virgen, de San Felipe del Progreso, la cual atiende también a mujeres de San José del Rincón. La segunda se construyó en 2014 en Temascalcingo. Ambas, son administradas cada una por un grupo operativo de entre 7 y 10 mujeres, las cuales son capacitadas para brindar apoyo a mujeres víctimas de violencia, siendo estas resguardadas temporalmente, para ser canalizadas a refugios.
En este contexto, detalló, “las Casas de la Mujer Indígena cuentan con infraestructura, equipamiento y personal capacitado, sin embargo, carecen de recursos financieros para realizar acciones en temas de derechos con perspectiva de género y con pertinencia intercultural.
Por ello, llamó a que se aprovechen los recursos con los que se cuenta y “rescatemos los espacios que brindan servicios a las hermanas de los pueblos originarios que sufren violencia y/o que promueven los derechos sexuales y reproductivos”. La iniciativa se remitió para su dictamen a la Comisión de Asuntos Indígenas.