Ante la inseguridad que padecen las mujeres que deriva en feminicidios y desapariciones por las cuales se han intensificado las manifestaciones, las y los diputados tienen el compromiso de llevar a cabo reformas que garanticen la protección de los derechos y para disminuir la violencia y hacer justicia a las víctimas y a sus familias, afirmaron las diputadas Mariana Uribe Bernal (Morena) y Karla Leticia Fiesco García (PAN).
Al expresar la postura de su grupo parlamentario por la conmemoración del Día Internacional de la Mujer, la diputada Mariana Uribe, presidenta de la Comisión para la Igualdad de Género, señaló que la pandemia de covid-19 incrementó la violencia contra las mujeres y niñas, por lo que llamó a la sociedad a redoblar esfuerzos para que frenar la violencia contra las mujeres sea una prioridad en las medidas de recuperación de la pandemia.
Aunque reconoció avances con las reformas impulsadas por la Legislatura para la equidad de género en la distribución de candidaturas a puestos de elección popular, puntualizó que la participación de las mujeres en la vida política estatal aún no es equitativa porque hay una brecha del 1.4% en cuanto a diputaciones, de 90.4% en presidencias municipales y de 20.2% en regidurías.
En su intervención, la legisladora Karla Fiesco lamentó el incremento de los feminicidios en el país, mientras que solo durante enero de este año en la entidad se cometieron 12 feminicidios, de los cuales sobresalen los ocurridos en Ecatepec, Toluca y Cuautitlán Izcalli, municipios con alerta de violencia de género por feminicidio.
Llamó a impedir que México siga siendo un cementerio, que los actos de corrupción destruyan vidas y que la incompetencia de las autoridades impere, por lo que pidió que los recursos asignados contra la violencia de género sean parte de un combate frontal contra estas acciones, que no haya más simulación ni un ejercicio de los recursos ajeno a los objetivos.
La diputada celebró las acciones que el Congreso estatal ha llevado a cabo, pero reconoció que no es suficiente, por lo que se debe trabajar unidos, sin intereses particulares o partidistas, con el simple anhelo de que nunca más, ninguna mujer en el Estado de México estado, vuelva a su casa violentada o simplemente, no vuelva.