Mientras miles de trabajadores del estado llevan años en la fila de espera para tener su jubilación, el Instituto de Seguridad Social del Estado de México y Municipios (ISSEMyM) apapacha al ex rector de la Universidad Autónoma del Estado de México, Jorge Olvera García, que le llegó a deber casi 850 millones de pesos, quien ha anunciado su culminación como trabajador de la Universidad.
Seguramente Olvera García se llevará jugosos recuerdos de la UAEMex, pero en la historia de nuestra Alma Mater y en el inconsciente colectivo de la comunidad, su rectorado será sin duda uno de los capítulos más oscuros y vergonzosos.
Como he referido para el caso de otros como él, su mayor aporte será volar de la institución para dejar de ser otro hijo cuervo que le saqueó los ojos a su Alma Mater.
Lo que no se jubila es la esperanza de que las investigaciones en las que está incluido lleguen a buen puerto.