¿Sabías que los residuos farmacéuticos pueden contaminar nuestro medio ambiente durante años y generar resistencia bacteriana? ¡Es momento de actuar! La Universidad Autónoma del Estado de México (UAEMéx), junto con el Sistema Nacional de Gestión de Residuos y Envases de Medicamentos A.C (SINGREM), lanzan la Séptima Campaña de Acopio de Medicamentos Caducos y sus Envases 2025.
En México, más del 70% de la población desconoce cómo desechar correctamente sus medicamentos, lo que contribuye a las más de 4,800 toneladas de medicamentos caducos cada año. Por eso, te invitamos a sumarte a esta importante iniciativa para proteger nuestro planeta y fortalecer la responsabilidad social.
En la Administración 2021-2025, recolectamos 2,254 kilos de medicamentos caducos y sus envases, que fueron destruidos acorde a la legislación sanitaria ambiental. Este año, puedes participar de diversas maneras:
1. Revisa en casa: Busca aquellos medicamentos que ya no usas o que han caducado. Identifica los envases vacíos que puedes reciclar de manera segura.
2. Lleva medicamentos caducos y envases a los puntos de acopio: La universidad contará con estaciones de recolección estratégicamente ubicadas para facilitar su disposición adecuada.
3. Corre la voz: Compartir información con compañeros universitarios, docentes, familiares y amigos.
4. Sé consciente del consumo: La compra responsable también es parte del cuidado ambiental.
Los puntos de acopio estarán disponibles hasta el 9 de mayo en las facultades de Ciencias Políticas y Sociales, Contaduría y Administración, Campus “Los Uribe” y Medicina, así como en los planteles “Cuauhtémoc” y “Dr. Ángel María Garibay K.” de la Escuela Preparatoria.
El SINGREM ha facilitado contenedores especiales para depositar medicamentos caducados, envases de medicamentos vacíos o con restos, medicamentos sobrantes de tratamientos. Está estrictamente prohibido depositar agujas, gasas, pilas, jeringas, productos químicos, termómetros, pañales o equipo de venoclisis.
Reflexión: Reciclar medicamentos no solo ayuda a proteger nuestro medio ambiente, sino también a preservar la salud pública. Al evitar la contaminación de nuestros recursos naturales, reducimos el riesgo de generar resistencia bacteriana y promovemos un entorno más saludable para todos. ¡Cada pequeño esfuerzo cuenta para un futuro más limpio y seguro!
